Sangrientas vacaciones en una isla griega
Joe D'Amato es un popular director de cine italiano conocido principalmente por los amantes del terror casposo y de serie B y, sobre todo, por los aficionados al porno y el cine erótico ya que siempre se ha movido entre estos dos géneros como pez en el agua. "Gomia, terror en el mar Egeo" es uno de sus títulos más conocidos por el gran público y todo un clasicazo de la caspa italiana de comienzos de los 80.
La película nos muestra como un pequeño grupo de amigos treinteañeros pasan unas agaradables vacaciones por Grecia cuando conocen a una joven y atractiva turista americana que se les une. Ella les invita a acompañarla a una isla alejada de la civilización, un sitio paradisíaco en el que hay un pueblecito donde viven varios amigos suyos. Todos se embarcan hasta el lugar y cuando llegan se dan cuenta de que el pueblo está completamente vacío, no hay ni rastro de los habitantes que parecen haberse esfumado sin más. Con su velero a la deriva y una fuerte tormenta amenazando cuando llega la noche, el grupo decide refugiarse en una casa. Y es entonces cuando comienzan a aparecer cadáveres y ven peligrar su vida por culpa de un misterioso asesino que les acecha. "Gomia, terror en el mar Egeo" es una perfecta muestra de cine de género añejo; con sabor vintage y hecho por y para fans de la casquería y los exploits italianos.
La calidad fílmica de la película no es buena, ni si quiera es medianamente decente. Joe D'Amato es un director muy irregular, con buena mano para el entretenimiento pero flojo como realizador y eso se nota bastante. A lo largo de hora y media podemos "disfrutar" de algunos errores de rácord, cortes de plano bruscos, abuso de zooms, diálogos de coña y (sobre) actuaciones de patio de colegio. Pero a pesar de sus fallos, que los hay y no se pueden ocultar; a pesar de su condición de película de bajo presupuesto y del tufo a telefilme gore y de serie B que tiene "Gomia, terror en el mar Egeo" es un título que os va a hacer gozar como críos en un parque de bolas de colores. Porque si buscáis entretenimiento, ver una película clásica y que es un pequeño título de culto entre los verdaderos amantes del cine de miedo y además tenéis antojo de sangre entonces vais a saber valorarla como lo que es y podréis perdonar sus limitaciones técnicas.
La peli es entretenida, tiene un ritmo bastante ameno y se deja ver; es muy dinámica. Además D'Amato va de menos a más, atrapando al espectador en su historia y ofrecienco poco a poco detalles sobre lo que ocurre en tan misteriosa isla. El director quizás no sea como profesional de los mejores que ha dado el género de terror, pero sí sabe crear suspense y esa es quizás la mejor baza que tiene "Gomia, terror en el mar Egeo". Porque aunque en la peli hay sangre y violencia, casi toda está concentrada en su tramo final y la primera hora de metraje es una cinta de misterio, con una buena e inquietante atmósfera de suspense que va creciendo y que se apoya en clichés básicos (una noche de tormenta, un cementerio, unas lúgubres catumbas) para incomodar y crear mal rollo. Y como ayuda extra está la acertada B.S.O., con melodías repetitivas y chirriantes que te ponen de los nervios y te involucran en la película; algo que siempre se agradece porque así uno sufre más viendo los protas morir. Y ya que los actores son una patata (el flashback en la barca hinchable es una fiesta de la caspa y la exageración jajajaja) y cuesta empatizar con ellos, por lo menos que la música nos haga mordernos las uñas. Y si, la peli es desagradable y tiene un par de escenas muy brutas. Principalmente hay una, que no voy a comentar aquí por si me lee algún despistado, que es de lo más políticamente incorrecto que he visto nunca y aunque me la esperaba más sangrienta sigue pareciéndome asquerosa. El personaje del asesino antropófago impone bastante, el tío acojona y su primera aparición me puso los pelos de punta. Es uno de los killers más burros que vi en una peli, un gigantón desequilibrado y siempre dispuesto a matar como si fuera un depredador. En el reparto podemos ver algunas caras conocidas, concretamente en el ámbito femenino. Están Serena Grandi, haciendo un papel secundario y demostrando que al principio de su carrera no era tan guapa (¿Cirujía?), Zora Kerova (habitual de los exploits italianos de la época que estuvo también en "Caníbal feroz" y en "El destripador de Nueva York") y en el papel principal la americana Tisa Farrow (hermana de Mia Farrow) y que un año antes habia trabajado con Fulci en "Nueva York bajo el terror de los zombies". Al reparto masculino no lo conozco y ni si quiera recuerdo ya sus caras, son intérpretes de cuarta que conocerán en la panadería de su barrio jajaja.
En definitiva, "Gomia, terror en el mar Egeo" es una entretenida película de suspense y terror con toques gore, de dudosa calidad y técnicamente flojita, pura serie B ochentera y un representativo título de la edad de oro del terror italiano. Para muy fans de esta época y de este cine típico de los videoclubs.
NOTA: 6/10
La peli es entretenida, tiene un ritmo bastante ameno y se deja ver; es muy dinámica. Además D'Amato va de menos a más, atrapando al espectador en su historia y ofrecienco poco a poco detalles sobre lo que ocurre en tan misteriosa isla. El director quizás no sea como profesional de los mejores que ha dado el género de terror, pero sí sabe crear suspense y esa es quizás la mejor baza que tiene "Gomia, terror en el mar Egeo". Porque aunque en la peli hay sangre y violencia, casi toda está concentrada en su tramo final y la primera hora de metraje es una cinta de misterio, con una buena e inquietante atmósfera de suspense que va creciendo y que se apoya en clichés básicos (una noche de tormenta, un cementerio, unas lúgubres catumbas) para incomodar y crear mal rollo. Y como ayuda extra está la acertada B.S.O., con melodías repetitivas y chirriantes que te ponen de los nervios y te involucran en la película; algo que siempre se agradece porque así uno sufre más viendo los protas morir. Y ya que los actores son una patata (el flashback en la barca hinchable es una fiesta de la caspa y la exageración jajajaja) y cuesta empatizar con ellos, por lo menos que la música nos haga mordernos las uñas. Y si, la peli es desagradable y tiene un par de escenas muy brutas. Principalmente hay una, que no voy a comentar aquí por si me lee algún despistado, que es de lo más políticamente incorrecto que he visto nunca y aunque me la esperaba más sangrienta sigue pareciéndome asquerosa. El personaje del asesino antropófago impone bastante, el tío acojona y su primera aparición me puso los pelos de punta. Es uno de los killers más burros que vi en una peli, un gigantón desequilibrado y siempre dispuesto a matar como si fuera un depredador. En el reparto podemos ver algunas caras conocidas, concretamente en el ámbito femenino. Están Serena Grandi, haciendo un papel secundario y demostrando que al principio de su carrera no era tan guapa (¿Cirujía?), Zora Kerova (habitual de los exploits italianos de la época que estuvo también en "Caníbal feroz" y en "El destripador de Nueva York") y en el papel principal la americana Tisa Farrow (hermana de Mia Farrow) y que un año antes habia trabajado con Fulci en "Nueva York bajo el terror de los zombies". Al reparto masculino no lo conozco y ni si quiera recuerdo ya sus caras, son intérpretes de cuarta que conocerán en la panadería de su barrio jajaja.
En definitiva, "Gomia, terror en el mar Egeo" es una entretenida película de suspense y terror con toques gore, de dudosa calidad y técnicamente flojita, pura serie B ochentera y un representativo título de la edad de oro del terror italiano. Para muy fans de esta época y de este cine típico de los videoclubs.
NOTA: 6/10
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